COMPAÑERA CRISTINA DÍAZ

La compañera Cristina ingresó como funcionaria de la Universidad a mediados de la década de los ’80. En plena dictadura ya integraba una mesa representativa desde la clandestinidad, junto a los referentes Arce, Reyes y Abel Barboza.

Por esa época también participaba en el PIT–CNT como representante de asuntos internacionales a nivel continental, participando de vuelos solidarios a Cuba organizados desde el PIT-CNT.
En el 1er. Congreso de AFFUR, en el año 1990, resulta electa presidenta, asumiendo sus funciones en dos períodos consecutivos.
Mantuvo una activa participación en los movimientos estudiantiles y de la enseñanza en general, dándole un seguimiento a los diferentes conflictos.
Fue Secretaria de Bienestar y participó como delegada al CDGAP desde la Secretaría de Gestión.
Activa militante en contra de los test psicolaborales en las pruebas de concursos, llevando a fondo su lucha.
Se la recuerda como una persona muy solidaria, sensible, organizada y discutidora en profundidad de los temas que la preocupaban y ocupaban desde la militancia.
Una vez jubilada, se mantuvo vinculada e involucrada en las luchas de AFFUR, incansable luchadora de los derechos de todas/os las/los funcionarias/os, con especial énfasis en los últimos tiempos, acompañando en la lucha de Comedores por mantener sus puestos de trabajo y mejoras continuas de las condiciones laborales.
Ferviente militante del Movimiento 26 de Marzo, participando en varias comisiones internas. Y por muchos años militó para el Cono Sur.
En los últimos años se dedicó a la militancia de las luchas internacionales, contra el imperialismo hacia Cuba, Haití, Bolivia, Venezuela, etc.
Hasta el último día fue militante de las causas populares y siempre continuó cercana a este sindicato, como una de sus referentes históricas.
Su ejemplo de vida, de mujer luchadora y militante de todas las horas, sigue vivo en cada uno y cada una de nosotras, bregando por una sociedad sin explotados ni explotadores.
La solidaridad y la fraternidad entre compañeros, la pasión y la dedicación en cada tarea y en cada lucha, son también su legado para continuar en la construcción permanente de nuestra Federación.

¡Cristina.. de tus manos tomamos la bandera de las causas de todos los pueblos.!