Ni compañeros/as sin horas ni estudiantes sin respuestas

En medio de un contexto de pandemia y crisis económica, las medidas de recorte que impulsa el Gobierno Nacional está afectando a la población más vulnerable del país arremetiendo contra las políticas sociales y educativas. Y las evidencias más notorias de la utilización de las tijeras de recorte del presupuesto educativo las podemos encontrar en la brusca reducción de grupos en la enseñanza media, principalmente a nivel de la educación técnica profesional, la popular UTU. Las decisiones de las autoridades educativas atentan contra el derecho al acceso a la educación pública de cientos y cientos de estudiantes, y golpea directamente a numerosos trabajadores con una importantísima pérdida salarial o directamente quedándose sin fuente laboral.
Este 1 de marzo, las y los afiliados a AFUTU, paran por 24 horas y adoptarán una medida de ocupación del edificio central de la UTU, para denunciar y rechazar los recorte salariales y pérdida de fuentes de trabajo.
Lo harán en el marco de la vigencia de la LUC, que atenta contra los derechos sindicales y fomenta el uso de la represión.
En ese marco, AFUTU se moviliza para enfrentar ese “mazazo” que representa la pérdida de fuentes laborales y de reducción de ingresos, así como el perjuicio que representará para los hijos/as de la clase trabajadora, la eliminación de grupos.
Los tristes y preocupantes hechos son que las autoridades de la educación aplicaron recortes en la asignación de horas, principalmente, las correspondientes al Programa de Formación Profesional Básica (PFPB), vinculadas al desarrollo de talleres en todo el país y a una reducción de horas de los alfabetizadores laborales, figura del FPB, que recorre los hogares de los estudiantes desvinculados para lograr que vuelvan a insertarse en el sistema educativo.
AFUTU viene denunciando la pérdida de unos 90 talleres y asignaturas técnico-tecnológicas de las áreas técnicas y se moviliza en defensa de los puestos de trabajo.
A esta situación se deben sumar otras desprolijidades, como el retraso en la definición del calendario de elección de horas, que dificulta a los docentes del interior del país poder conseguir transporte rápidamente para asistir en tiempo y forma a la elección de horas.
Este 1 de marzo, mientras los medios de comunicación harán una profusa cobertura de la implementación de la vacunación contra el Covid en nuestro país, habrá cientos de dignos trabajadores/as de la educación que se plantarán firme contra estas políticas de recorte.
Desde AFFUR nuestra mayor solidaridad y apoyo a las compañeras y compañeros de AFUTU en defensa de la educación y las fuentes laborales.

Mesa Ejecutiva de AFFUR